VioGen, igualdad y elecciones 2019 (Parte 1)
El 28 de abril de 2019 tenemos una cita importante, bien sea como partícipes o como espectadores. Tenemos unas elecciones generales a la vuelta de la esquina, lo cual solo puede significar una cosa: propuestas. Durante la próxima semana, a través de prensa, rotativos, televisión, publicidad, cartas, conferencias y demás parafernalia mediática seremos sometidos a un bombardeo constante de información troceada y cocinada por parte de los diversos agentes que componen los “futuribles” para ocupar el hemiciclo y resto de instituciones representativas.
El objetivo de este artículo es enumerar las propuestas electorales que cada partido desarrolla en su programa con relación a igualdad y VioGen. Es, por tanto, un ejercicio informativo y de coherencia, aunque este autor inevitablemente deba caer en muchos momentos dentro del charco de la subjetividad. No obstante, procuraremos enlazar fuentes y texto adjunto para que sea el lector el que, en última instancia, estire de la cuerda lo que considere oportuno.
Dicho lo cual, empecemos.
Ciudadanos
Comencemos por el programa electoral de Ciudadanos. Nuestro análisis estará centrado en dos partes: en primer lugar, el ya citado programa electoral. Dividido en 14 secciones y 175 puntos, el grueso más interesante lo encontraremos en la subsección VII, ‘convertir España en el mejor país del mundo para las familias’. La segunda parte será un documento ad-hoc denominado ‘Manifiesto Feminismo Liberal’, compuesto por 10 puntos y vídeos promocionales.
En los primeros compases de las propuestas (punto 8), parece que Ciudadanos deja su postura bastante clara: reforzar las competencias del Estado para garantizar la igualdad entre todos los españoles, blindaje del matrimonio entre personas LGTBI e inclusión del derecho a la no discriminación por razones de condición u orientación sexual, llegando incluso hasta la propia corona. El partido liderado por Albert Rivera tiene una dirección muy sólida: intervenir en los organismos públicos y privados para acometer una igualdad en todos los ámbitos de la sociedad y a todos los niveles.
Es a partir del punto 92 cuando Ciudadanos se mete en harina. Promoción de la natalidad y reconfiguración de las parejas de hecho a través de una Ley de Parejas de Hecho, equiparando dicha construcción a los matrimonios, abre la temática para dejar paso a la propuesta sobre custodia del partido naranja.
Siendo coherentes con su postura, Ciudadanos defiende la creación de una Ley de Custodia compartida que sostenga esta opción como preferente ante un caso de divorcio o separación, a diferencia de otros partidos del espectro político y asimilando la doctrina impuesta por el Tribunal Supremo.
Del mismo modo, ciudadanos amplía sus medidas de conciliación ampliando los permisos de maternidad y paternidad, apoyando a las mujeres que se reincorporen al trabajo tras la maternidad (punto 97, sección 3), flexibilización de horarios y fomento del teletrabajo.
Es importante remarcar que Ciudadanos se desmarca completamente del resto de partidos punta de lanza en cuando a su posición sobre la gestación subrogada, entendiendo que ha de aprobarse una Ley de Gestación Subrogada altruista con la idea de facilitar una construcción familiar con descendencia para todas aquellas personas que no puedan (punto 99).
Como ya hemos comentado anteriormente, Ciudadanos propone atacar desde el estado la discriminación, proponiendo en su punto 100 una Ley Orgánica de Igualdad de Trato y no Discriminación y en su punto 103 una nueva Ley de igualdad real para el colectivo LGTBI. ‘Combatiremos la intolerancia y los discursos del odio’. Aquí nos gustaría saber qué se considerará desde el estado ‘discurso del odio’ y cómo se va a combatir. ¿Interacciones con el sistema educativo? ¿Leyes de censura ante sensibilidades religiosas, ideológicas y de género?. Nos tendremos que conformar con el ‘siguiendo las recomendaciones de organismos internacionales’, me temo.
Ciudadanos hace mención a la igualdad efectiva en el ámbito laboral y lucha contra la brecha salarial en su siguiente punto (punto 101). En ese sentido, a la hora de afrontar el acceso al empleo y la promoción profesional, se tendrá ‘en cuenta la situación de las mujeres pertenecientes a grupos vulnerables’ y promoción del currículum neutro. Imaginamos que se referirán a cuotas dentro de convocatorias públicas o porcentajes dentro de empresas de cierto tamaño, siendo su última parte la que hace referencia a los puestos visibles de responsabilidad, ‘GARANTIZANDO la presencia equilibrada de mujeres y hombres en las adm. públicas’ y ‘fomentando’ lo propio en empresas privadas. Parece que sí, que la cosa va de cuotas.
En cuanto al Pacto de Estado contra la Violencia Machista (punto 102), el partido naranja se adhiere completamente a los compromisos firmados en el tratado CEDAW, considerando además necesario establecer controles y mecanismos para auditar dónde van los fondos que se destinen a la violencia machista. Del mismo modo, en el punto 103, Ciudadanos propone la creación de una ‘Ley para la prevención, asistencia y protección de la mujer frente a la violencia sexual’ a tenor de lo establecido en el Convenio de Estambul. Lo que NO encontramos, sin embargo, es una referencia directa a la violencia intrafamiliar también recogida en dicho convenio.
En cuestiones económicas, podemos acudir al desglose que este partido tenía como referencia hasta la primera semana del mes de abril, donde establecía parámetros muy similares. Entre los puntos 102 y 107 del programa 2016-2019, Ciudadanos se mostraba muy a favor de apoyar un incremento presupuestario, una modificación de leyes y un encaje más eficaz en todo el engranaje que involucra la violencia de género: desde un pacto de estado (102), hasta una modificación de protocolos para atención integral (107), pasando por un incremento de la inversión a través de recursos para los juzgados (106), ampliación de medidas preventivas, de información, etcétera, para todas las formas de violencia contra la mujer incluyendo casos de mutilación genital femenina y matrimonios forzados(103), además de una dotación presupuestaria suficiente para toda aquella violencia cometida sobre la mujer. Queremos recordar al lector que dicho programa estaba colgado en su web hasta hace algo menos de tres semanas. Podréis encontrarlo aquí: https://hipertextual.com/2016/06/programa-electoral-ciudadanos-pdf-2016
Pasemos a la segunda parte del análisis. En la sección ‘manifiesto feminista liberal’, Ciudadanos cita 10 puntos, tratando de hacer del movimiento feminista una combinación de agentes sociales y personas más transversal: ‘El feminismo es una causa de todos’ (punto 1), ‘El feminismo liberal no excluye al hombre, es una batalla de toda la sociedad’ (punto 6), ‘Guerra de sexos es pasado’ (punto 10)…
Encontramos cosas que nos chocan, empezando por el título. Si bien encabeza ‘feminismo liberal’, hay ciertos puntos como el de poner la educación en el centro (punto 6) cuya dificultad para encajarlos dentro de un verdadero liberalismo es complicado, sobre todo si acudimos de nuevo al programa que Ciudadanos ha esgrimido hasta hace tres semanas. En él (más concretamente, en el punto 100 del programa anteriormente enlazado 2016-2019) ciudadanos propone la promoción de políticas de igualdad y modificaciones del sistema educativo, ‘haciendo partícipes a las mujeres de entornos eminentemente masculinos’. Parece claro que aquí Ciudadanos se refiere a la minería y a la pesca, ¿no? Del mismo modo, con respecto a la libertad educativa, imaginamos que la dirección general de Ciudadanos irá en contra de lo que opina el señor Pérez-Nievas con respecto al programa Skolae, modelo educativo impuesto por el gobierno de Uxue Barkos y Geroa Bai en Navarra. Aunque quién sabe, quizá sea la sensatez la que te permite modificar el sistema educativo sin ningún tipo de problema, ya que si se propone educar en los mismos valores será porque nos faltan esos valores, ¿verdad? ¿Y los valores futuros también los elegirá el gobierno autonómico? Por dejar la ‘libertad educativa’ bien enmarcada, vaya.
La situación de Ciudadanos en este sentido se podría resumir en el punto 8, donde comentan que ‘es urgente implementar el Pacto contra la violencia machista para erradicar esta lacra’. Este pacto incluye medidas como la consideración de víctima de Violencia de género tras haber sido peritada por los servicios sociales, dejando al margen el procedimiento judicial, asistencia psicológica a menores con el consentimiento único de la madre, fortalecimiento del sector judicial encargado del tema, devolución de competencias a las CC.AA., etcétera.
Resúmen
Ciudadanos, muy en la línea de la mayor parte del hemiciclo, elige dotar de mayor volumen económico y medidas legislativas a lo que en su programa denomina como ‘lacra social’, la violencia de género. Asume disposiciones de la ley 1/2004, Ley Integral contra la Violencia de Género (LIVG), ampliando y reorientando posiciones en la educación y en la empresa para conseguir llevar a cabo sus propuestas.
Encontramos incoherencias tanto en el modelo educativo como en la futura proyección de esos denominados ‘estímulos’ que Ciudadanos declara, fundamentalmente por el corte marcadamente liberal del partido. Con respecto al incremento presupuestario y línea de seguimiento de la LIVG, no es objeto de este artículo criticar dicha ley; solamente podemos decir que Ciudadanos parece encontrarse cómodo en esas aguas.
Podemos
El programa de este 2019 para Podemos/Unidas Podemos se desarrolla a lo largo de 105 páginas, siendo la igualdad uno de los núcleos de actuación más importantes. Aun estando diseminadas tales intenciones, encontramos aglutinadas en el apartado ‘Horizonte Morado y Economía de los Cuidados’ la mayor parte de puntos sobre feminismo e igualdad.
El texto comienza, de modo introductorio, posicionando a España ‘en la primera línea del panorama internacional como un país feminista y de derechos’, mencionando las violencias machistas, sexualidad, implicación en todas las esferas de la vida y objetivos educacionales como asignaturas pendientes a tener en cuenta.
La primera propuesta, punto 44, es toda una declaración de intenciones: trabajar para una Constitución decididamente feminista. El ‘cómo’ parece resolverse, entre otras cosas, con el punto 45, inmediatamente siguiente: ‘Implementar un Plan Estatal de Lucha contra las Violencias Machistas con una dotación anual de 600 millones de euros’.
Lamento que, en esta parte, este autor que os escribe deba tomar dicha cifra como algo personal: por los 34 millones que cita ESTA noticia, que parecen no escandalizar tanto. Por ESTA otra, porque total, no sale a cuenta, ¿no? Podría poner otras fuentes, pero prefiero que naveguéis a través de vuestro buscador favorito para daros de bruces con cuánto se invierte en España en investigación contra el cáncer. O cuánto se invierte en suicidios (donde el total de mujeres fallecidas por suicidio multiplica en ocasiones POR MÁS DE VEINTE el de fallecidas por un asesinato calificado como VioGen). Imagino que eso será menos ‘lacra’ para según qué agentes políticos. Repetimos: 600 millones de euros al año. Bien. Volvamos a la cordura.
Garantías de procesos de denuncia y judiciales con perspectiva de género, formación de género, ampliación del sistema VioGen e implementación inmediata del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, coincidiendo en esto último con el partido Ciudadanos. Los puntos 46 y 47 implicarán también un incremento presupuestario a través de planes de compensación, prestaciones económicas y alternativas habitacionales (incluyendo niños).
En el punto 48 se hace referencia a reformar lo que se define como ‘violencia machista’, extendiéndolo a la figura de la mujer más allá de la pareja, como recoge el Convenio de Estambul. Lo paradójico del asunto es que el Convenio de Estambul también recoge la violencia doméstica, entre las que se incluyen ciertas formas de violencia contra el abuso de ancianos, maltrato infantil y… violencia contra el hombre. Sin embargo, este autor no ha encontrado referencia directa hacia esta violencia que, insistimos, recoge el Convenio. La parte contratante de la primera parte nos encanta, pero la parte contratante de la segunda parte…
Sigamos. Tras proponer protocolos contra las violencias machistas y LGTBIfobia con su correspondiente carga de profesionales (punto 49), Unidas Podemos propone generar una asignatura de feminismos (punto 50), siendo también punto clave introducir ‘contenidos feministas’ de manera transversal a lo largo de toda la vida educativa. Coincidiendo con Ciudadanos de nuevo, parece que el futuro educativo de las generaciones venideras tendrá un cariz político bien determinado, sea el de un partido u otro.
Continuando con cuestiones de cuota y paridad OBLIGATORIAS en las administraciones públicas y en organismos con financiación pública (punto 51), el texto entra dentro de las libertades sexuales, dejando claro que se trabajará en la educación afectivo-sexual dentro del sistema educativo (punto 52), el famoso ‘Solo sí es sí’ del que poco resta hablar (punto 53) y la ampliación de derechos de personas homosexuales, transexuales, etcétera.
En este último punto habla de blindar por ley la protección ante la discriminación por motivos de identidad de género, así como el derecho a la libre determinación de la identidad y expresión de género (junto con planes de empleo, inclusión de su atención en el Sistema Nacional de Salud…). Este punto nos genera la duda de si en una futura hipertrofia legislativa nos encontraremos con una ley homóloga a la famosa Bill-C16, reguladora de los pronombres en Canadá.
Los puntos 55 y 56 nos hablan de cooperación feminista, situando a las mujeres como ‘motor y foco del desarrollo’. La diversidad familiar en el marco de las construcciones de pareja LGTBI también tiene su espacio, así como la protección de familias monoparentales (punto 63). También habrá modificaciones para los permisos de paternidad y maternidad: iguales e intransferibles, con un aumento paulatino tras una inmediata implantación de 16 semanas (punto 60). Por supuesto, el sistema favorecerá una ‘maternidad libre y decidida’ poniendo a disposición de la mujer métodos tanto para favorecer como para interrumpir el embarazo (punto 62).
La brecha salarial ocupa el lugar 61 de la lista, proponiendo medidas sancionadoras para toda aquella empresa que sobrepase un 20% de diferencia entre retribuciones, debiendo justificarlas debidamente.
Todo ello queda rematado en el punto 71 con la creación de una ‘Vicepresidencia de Feminismos y Economía de los Cuidados’.
El programa, fuera de este gran bloque, incluye también otras medidas como la implantación de listas cremallera (punto 116), siendo su intención superar la regla de paridad 40-60 que la Ley de Igualdad trajo, pudiendo ser rota dicha paridad SI BENEFICIA A LAS MUJERES.
También encontraremos medidas para promocionar el deporte femenino y la inclusión de los profesionales del sector a la vida laboral, poniendo ‘especial atención a la inclusión laboral de las mujeres y a las oportunidades a través del empleo público’ (punto 176 que os recomiendo leer encarecidamente).
Resúmen
Podemos/Unidas Podemos hace de la lucha feminista una de sus principales bazas, tratando de aglutinar servicios públicos y leyes para implementar un auténtico estado feminista, incluso admitiendo desequilibrios, en pos de la igualdad.
Conocemos de sobra las implicaciones que ha tenido el discurso del partido morado durante todos estos años, habiéndose sumado sin ningún tipo de dificultad al movimiento 8-M y poniendo el debate de género sobre la mesa de manera contínua. Por tanto, el programa muestra coherencia con su postura.
Lógicamente, ciertas medidas acotan en cierta modo las libertades tanto de las empresas como de los sectores educativos a la hora de tomar una dirección ideológica lateral a la propuesta por Unidas Podemos (ya sea por cuestiones de salario, currículum educativo, % de contrataciones…), caso de ser este partido el que finalmente gobierne, aunque como ya hemos comentado antes parece que hay una búsqueda de enmarcar una política de la equidad no solo en UP, sino en varios de los principales partidos que se presentarán este próximo 28 de abril.
Por lo demás, Unidas Podemos propone un estado-auditor muy profundo con muchas ramificaciones, incrementando ostensiblemente las partidas presupuestarias en materia de género, incluyendo equipos, tribunales, medidas de prevención y cambios legislativos.