Nadal y las mujeres en el tenis
Rafael Nadal ha sido protagonista para la prensa nacional en cuanto a declaraciones en el torneo de tenis Mutua Madrid Open. Entre otras cosas, él afirmó que “realmente, yo no opino sobre por qué sucede esto también en el fútbol, o el golf. O en el de los modelos, por qué en este campo de la moda las mujeres cobran más que los hombres”. También dijo “qué más puedo querer yo, sino que todos seamos iguales y que tengamos los mismos derechos. A lo que tenemos que ir es a que nadie cobre más que nadie por el hecho de ser hombre, o por el hecho de ser mujer”.
Nadal a lo que quería referirse con ello, y que luego remarcó, es que cada uno debe cobrar por su mérito, por el beneficio que genera, y no por si es hombre o mujer. No podría tener más razón el número 2 del mundo de la ATP. Sin embargo, se está viendo acosado en todas las declaraciones que da entorno a la misma cuestión: la paridad salarial entre hombres y mujeres en el tenis.
Antes de seguir, pongamos un poco de historia para explicar por qué Nadal puede estar cansado de que le pregunten por el tema de los salarios en el tenis.
En el tenis existen 2 asociaciones profesionales de tenistas, la de los hombres (ATP) y la de las mujeres (WTA), esto es así desde que el tenis es lo que es, puesto que la fundación de la de los hombres fue en 1972 y la de las mujeres inmediatamente después, en 1973.
Para que en el tenis se diese una discriminación salarial deberían competir en la misma competición, con los mismos oponentes, pero no es así. Como Nadal aquí no se ha metido, prosigamos.
La batalla de los sexos
En 1973 se produjo el primer enfrentamiento entre un hombre y una mujer en tenis a nivel «profesional» y os explico las comillas.
Ese encuentro lo disputaron Bobby Riggs y Margaret Court, Bobby había sido número 1 pero en 1973 ya tenía 55 años (de aquella época) frente a una número 1 en activo como era Margaret que venía de ganar 3 Grand Slam ese mismo año. El resultado fue victoria aplastante de Bobby en 2 sets por 6-2 y 6-1, a ese partido se le conoce como “La masacre del día de la madre” ya que coincidió la fecha del partido con esa festividad.
Pasan unos meses y Bobby, envalentonado, propone una revancha a otra de las míticas jugadoras de tenis de la historia, Billie Jean King. Aquí vamos a extendernos un poco sobre el perfil de cada uno porque de verdad que es hilarante:
Billie: Icono feminista y lesbiana casada con un hombre, que para mayor confusión ella misma declaró que cuando se casó con él estaba enamorada.
Bobby: Cincuentón con un cuerpo maltratado por los vicios que tenía así como con las apuestas que le sumieron en un mar de deudas. Además llevaba 14 años sin jugar profesionalmente al tenis al haberse retirado en 1959.
Llega el esperado partido para que Bobby se enfrente a Billie, las cifras son tremendas:
– 90 millones de telespectadores (recordemos, en 1973).
– 30.000 en el estadio.
– 100.000$ de premio que teniendo en cuenta la inflación ahora serían 600.000$.
¿Resultado? Bobby pierde ante Billie por 6-4, 6-3, 6-3. Era a 5 sets y Billie se llevó 3 seguidos, es una victoria contundente pero como se puede ver, bastante más ajustada que la de Bobby contra Margaret.
Sobre este partido, llamado “La batalla de los sexos” se ha hecho incluso una película estrenada en 2017 con el mismo nombre por título.
Una historia de humillaciones en el tenis
No solo ocurrió con “La masacre del día de la madre”, volvió a ocurrir 2 veces eso de que una mujer saliera humillada de un partido de tenis contra un hombre.
El último duelo oficial entre hombres y mujeres ocurrió en 1993, en este caso sí que ambos estaban en activo y en plena forma, enfrentó a Jimmy Connors (41 años) y Martina Navratilova (37 años), peeeero —siempre hay un pero— Navratilova puntuaba en el pasillo doble de Connors, es decir, Connors solo podía hacer punto en la pista individual pero Navratilova puntuaba en toda la pista, individual y de dobles.
Incluso con esta ventaja, Connors se impuso en el primer set de manera ajustada con un 7-5 y Navratilova no pudo aguantar el segundo set cayendo por 6-2. Curiosamente, ambos se llevaron casi 1 millón de dólares.
La última vez que ha ocurrido un partido mixto mediático fue en partido no oficial en 1998. Las hermanas Williams propusieron un duelo al alemán Karsten Braasch. Es normal que no os suene, era el 203º.
Pero esperad que aquí también hay truco: en 1998, las hermanas Williams con 16 y 17 años, conociéndose ya que iban a ser históricas, le propusieron el duelo a Braasch de 31 años, que era conocido por ser fumador y bebedor.
De hecho, Braasch no ocultó sus vicios y durante el partido estuvo fumando y bebiendo. Cada hermana Williams jugaría un set contra Braasch. El primero lo ganó Braasch por 6-1 contra Serena y el segundo también por 6-2 contra Venus.
Y las declaraciones de las hermanas Williams dejaban muy claro porqué no se ha vuelto a intentar mezclar a hombres y mujeres en el tenis.
“No sabía que iba a ser tan difícil. Pegué golpes que habrían sido ganadores en el circuito de mujeres y él llegó a ellos muy fácilmente”
Braasch no relajó en absoluto el ambiente y fue claro al respecto:
“No tendrían oportunidad contra cualquiera de los 500 mejores porque hoy jugué como el 600. Esta es otra liga”
Todo el tenis en la misma dirección
No son solo declaraciones o hechos puntuales. En 2016 el director del torneo Indian Wells, Raymond Moore, tuvo que dimitir tras decir que si fuera una jugadora se arrodillaría cada noche y daría las gracias a Dios por el nacimiento de Federer y Nadal. Incluso una de las hermanas Williams aseguró que ella sabe perfectamente que existen diferencias físicas entre hombres y mujeres.
A colación de lo que Nadal ha dicho en el Mutua Madrid Open, Novak Djokovic lo dijo en Indian Wells en 2016, que ellos deberían ganar más que las mujeres debido a que reúnen un mayor número de espectadores y es que como digo, no es algo que piensen un par de personas sino que todo el deporte lo tiene bastante asumido ya que llevamos 21 años sin otra secuela de la batalla de sexos en el tenis.
Porque como he dicho, todo el deporte tiene asumido que no tiene sentido enfrentar a un hombre y a una mujer en la misma competición de tenis. Billie ya dijo que le costó mucho derrotar a Bobby, retirado con 55 años. Y ha sido la única vez que eso ha ocurrido en la historia del tenis. Parece ser que tras Navratilova y las hermanas Williams ninguna mujer ha sido capaz de retar o aceptar el reto. Hasta Donald Trump se ha sumado a esta antigua batalla pidiendo un partido entre Serena Williams y John McEnroe (que ahora tiene 60 años).
Para que no todo parezca malo en este artículo, termino comentando que Bobby y Billie se hicieron buenos amigos. Ah, y si queréis saber cuanto ha ganado un tenista en su carrera podéis mirarlo en su página de la ATP o WTA.
Sobre por qué hombres y mujeres cobran distinto y si es por el mismo trabajo, mirad nuestro vídeo en YouTube, “Brecha Salarial… ¿Es real?”.